Difusión y promoción de la colección como estrategia de dinamización de la Biblioteca

Nos debemos a nuestros usuarios… es esta una premisa con la que todos quienes nos desempeñamos en bibliotecas estaremos de acuerdo; todo nuestro accionar, las actividades y servicios que desarrollemos se orientan a satisfacer sus necesidades e intereses.

La colección de la biblioteca constituye parte fundamental del patrimonio documental, es su motor, a la vez que el principal recurso a partir del cual se ofrezcan productos y servicios de información y cultura diversos. De acuerdo a la tipología de bibliotecas, la colección se integrará por documentos en distintos soportes y de diversas temáticas pero en todos los casos, sea el tipo de biblioteca que sea, la difusión y promoción será vital, urgente y necesaria en aquellas instituciones con escasa afluencia de público, inauguradas recientemente y/o poco conocidas.

La difusión se entiende como la réplica del mensaje que queremos dar, más allá de los medios de comunicación que se empleen para tal fin. El conocer a nuestra comunidad de usuarios -información que nos es dada por excelencia a través de estudios de usuarios, así como también por estudios de consumo cultural-, nos permitirá llevar a cabo una difusión más selectiva de nuestra colección de acuerdo a los tipos de usuarios.

La palabra promoción tiene varias acepciones, según el Diccionario de la Real Academia sería tanto la “elevación o mejora de las condiciones de vida, de productividad, intelectuales, etc.” como el “conjunto de actividades cuyo objetivo es dar a conocer algo o incrementar sus ventas.” Cualquiera de estos sentidos se relaciona con la idea que aquí se quiere desarrollar: a través del desarrollo de ciertas actividades la biblioteca busca hacer conocer sus propuestas, en beneficio de la mayor cantidad de personas, buscando mejorar su nivel cultural, intelectual y calidad de vida.

En muchas ocasiones nos proyectamos y dedicamos mucho tiempo a pensar, planear y llevar a cabo actividades que sean de interés y disfrute para nuestros usuarios y público en general y perdemos de vista que en nuestra colección tenemos un potencial increíble para fidelizar a los usuarios reales, atraer nuevos públicos, difundiendo los materiales conocidos y que se esperan encontrar en una biblioteca de nuestro tipo, así como los libros raros, incunables, curiosidades, ediciones especiales, libros objeto, entre otros.

Si queremos que el público visite la biblioteca, haga uso de su colección y sus servicios, es fundamental que la conozca, que sepa que puede encontrar en ella. Por tal razón, acciones que quizás resulten muy simples pueden causar cambios en este sentido y constituirse en nuevas dinamizadoras de la biblioteca.

En esta línea, el post pretende sensibilizar sobre este aspecto en particular de la promoción y marketing en servicios bibliotecarios, mencionando algunas acciones, conocidas seguramente por todos, pero orientadas aquí a las colecciones.  

Propuestas para desarrollar en el espacio físico de la Biblioteca

  • Novedades de la Biblioteca y recomendaciones lectoras que sean colocados en espacios estratégicos y en exhibidores que los destaquen y sean visibles para todos, con consignas que sean atractivas y despierten el interés. 
1

Hamilton Public Library, Chicago

20160204_205144

Biblioteca Pública de León, España

  • Exposiciones de documentos que presenten, informen y den relevancia a colecciones temáticas específicas, vinculadas a temas de actualidad, entre otros.
  • Distribución de las colecciones y sus correspondientes salas de lectura por tópicos de interés, que no necesariamente reciben los mismos nombres de materias que establecen los sistemas de clasificación. Esta decisión por ejemplo han tomado los profesionales de la Biblioteca Pública de Santiago (Santiago de Chile), en la que al recorrer sus espacios destinados a colecciones y lectura y observar su sitio web, se visualizan bien diferenciados por grupos de interés y colecciones.  También es un ejemplo que se puede visualizar en la Hamilton Public Library de Chicago, tal como se observa en la imagen.
Hamilton Public Library, Chicago

Hamilton Public Library, Chicago

Propuestas para llevar a cabo en línea

  • Difusión de novedades de la Biblioteca a través de las redes sociales. Ya desde hace un buen tiempo las redes se han convertido en aliadas de las bibliotecas, brindándonos herramientas accesibles que favorecen a brindar nuevos productos y servicios. Pinterest es un ejemplo de red web 2.0 que permite difundir colecciones de una manera atractiva.
  • Digitalización de colecciones locales, de valor histórico y patrimonial, colecciones en las que se debe atender especialmente a la conservación. Las iniciativas de digitalización se han convertido en prioridad para muchas instituciones por las razones que todos conocemos;  amplían el espectro de usuario que pueda acceder al material, contribuyen a la conservación de los documentos, nos aportan visibilidad y difunden nuestras colecciones. Internet Archive es una biblioteca digital que permite albergar documentos digitalizados y es una solución para los casos de instituciones que no cuenten con un servidor web propio. 
  • Sugerencias y recomendaciones de documentos que se encuentran en la biblioteca y otros que no, de modo de ampliar las inquietudes, esto es particularmente interesante para libros de literatura recreativa. Una posibilidad es la de compartir sugerencias de redes sociales de lectura tales como Lecturalia y Quelibroleo.
  • La multiplicidad de recursos disponibles en internet nos obliga a buscar exhaustivamente, investigar, evaluar, seleccionar los recursos de calidad en el área en que nos desempeñamos, para poder orientar luego a nuestros usuarios. Esta información organizada podemos brindarla a través de sitios web y blogs por mencionar algunos de los más comunes.

*Fotografía de autoría propia

Deja un comentario